miércoles, 22 de abril de 2009

Las fotos de Javi



Y bueno, no iba a ser yo el único que no pusiera sus fotos, así que aquí las tenéis.

Pulsad sobre la foto de arriba o sobre el link para verlas

sábado, 18 de abril de 2009

Las Fotos de Saul

...
...
Ya he subido (bueno, estoy en ello) las fotos de mi cámara. Espero que os gusten.
Para verlas haz click en la foto de arriba, en el enlace lateral (o aqui)

miércoles, 15 de abril de 2009

Postales desde Islandia

Esto es solo una pequeña muestra de las fotos que hicimos. Espero os gusten.
El resto las subire cuando entregue los informes de la oposicion. Bss





martes, 14 de abril de 2009

Al sur de Stykkishólmur

(continua del anterior...)

¿Hay vida después del jaccuzzi?

La respuestas por increíble que parezca es SI, y nosotros seguimos adelante.

¿No está mal verdad? una entrada a la isla bastante espectacular, hemos coronado el Eldborg, uno de los volcanes más conocidos del mundo (¿os acordáis de "Viaje al centro de la tierra"? pues si amigos, ESE es el Eldborg, el volcán donde comienza toda la novela).

Pero el problema de poner un listón tan alto es que, pocas veces se puede superar. En otra ocasión os diría que es así, pero generalmente cuando estoy con alguno de mis primos no lo es, y esta vez estabamos unos cuantos...

Podéis imaginaros que despertamos con fuerzas, dormimos genial y habíamos recuperado todo el cansancio del viaje. Aunque el día era en verdad sobrecogedor, unas nubes opacas ocupaban el sol por completo, no me extraña que los vikingos creyesen que el Ragnarok iba a llegar de un momento a otro.

No había mucha gasolina, así que decidimos atravesar Snaefellsness, por la carretera 55, en el extremo este de la península, y al rato nos encontramos con lo que más ilusión nos hacía... ¿mujeres? ¿comida? ¿tiendas frikis? no amigos, NIEVE, por fin vimos algo más que unos cuantos bloques de nieve aisladas, esto ya empezaba a parecer algo distinto. No hace falta que os cuente que en cuanto encontramos un paisaje bonito bajamos a revolcarnos en la nieve, a hacernos fotos, a correr y a hundirnos en los huecos que oculta la nieve, y el clima ayudó, no es que la temperatura subiera pero el viento se paró (al menos todo lo parado que puede estar en Islandia).
Este es Saúl, contento al llegar al país de los helados

La ruta, aunque era corta, estaba empezando a llevar un poco más de tiempo del que esperábamos, debido a nuestras innumerables y continuas paradas. Cualquier excusa nos valía para bajar y tocar un poco de nieve, hasta que después de pararnos en un lago congelado nos dimos cuenta de que nuestro coche... apenas tenía gasolina (vamos que estaba en la reserva). Y es que ya os he dicho que si nos juntamos varios primos, lo que no nos faltan son emociones. Cuando montamos en el coche, a la vista de varias montañas que nos observaban abrigadas por su apacible tercipelo, teníamos muy claro que no podíamos parar, cada parada reducía la distancia que podíamos recorrer (que nosotros pensábamos que era poca).

Aquí tenéis la carretera, tal y como quedaba a nuestro paso

Pasamos cientos de paisajes que habrían merecido mas tiempo y algo más de atención que una foto en movimiento desde un coche, pero no podíamos permitirnos parar. Nuestro destino era Stykkishólmur, la ciudad más grande de toda la península de Snaefesnellss. Y era nuestro destino no por lo bonito que era, que era bien bonito, si no por que era la única gasolinera que había en bastante distancia, así que cuando lo divisamos al fondo del paisaje respiramos aliviados, pero el alivio nos duró bien poco, un mar nos separaba del pueblo y nos obligaba a rodear todo el golfo kol-grafafjördur (esto lo escribo por que no soy capaz de decirlo).

La cosa se ponía fea, aunque por lo menos ya no estábamos en la montaña, y nos encontrábamos con "bastantes" coches por la carretera. Llevábamos ya 50 kilómetros de reserva, podéis imaginaros que mucho mucho al coche no le quedaba, pero ya estábamos a nada más que 10 km de "la ciudad", ¡Y por una carretera decente y recta!, y menos mal, por que el coche ya no aceleraba

Y llegamos a la ciudad, y fuimos al faro, y comimos como buenos españoles un montón de embutidos haciendo ruido y llamando la atención de todo aquel que pasaba, y miramos el ferry partir, y contemplamos la ciudad, Stykkishólmur... pero esta no nos sobrecogió, ¿Ciudad? yo incluso me habría planteado darle el status de pueblo.

¿Y esto es la ciudad más grande de todo Snaefesnellss? pues si.

Ya teníamos gasolina, ya habíamos comido, incluso pudimos beber un té calentito que Alberto hábilmente había traído en un par de termos, pero ahora ¿Qué? pues está claro, ¿no? Otro volcán, que por volcanes no será, eso si, este helado, que si no esto no es un desafío...

Y cogimos el coche y nos pusimos en marcha hacia el sur, al sur de Stykkishólmur, y nos pusimos a escalar un volcán nevado. ¿Y hacía frío? pues bueno, hacía unos cuantos grados menos que el día anterior, pero apenas hacía viento, lo que hizo esta tarde una de las más agradables.
Seguro que todos vosotros en algún momento habéis jugado en la nieve, pero subirse a lo alto de un volcán completamente nevado, con zonas donde te hundes en la nieve hasta mas de las rodillas, y donde todo lo que ves es una enorme extensión blanca que te rodea, donde lo único que rompe la monotonía es un lágo también helado, eso, eso si es sobrecogedor, tal vez la confusión sólo te dure unos segundos, quizás no llegue ni siquiera a unas pocas décimas, pero en ese momento todo parece fluir de manera distinta.

Estas fotos dan la panoramica de lo que se veia desde arriba.


Y después de escalar el volcán tocaba volver a la misma casita donde habíamos pasado la noche anterior, con su jaccuzzi y con sus camas calentitas... pero eso si, teníamos que hacerlo rodeando la península, como debe ser.

Algunos de los paisajes eran auténticas postales

Al llegar, teníamos muy claro que queríamos jugar a algún juego de mesa, pasar la noche entre risas y tes, y hablar hasta caer rendidos, pero no fue posible, estabamos agotados, sólo pudimos caer rendidos, por lo menos cumplimos uno de los planes...


(continuara...)

domingo, 12 de abril de 2009

El equipo 1, la ambiciosa ruta de Snaefellsnes

......
Nuestro Viaje a Islandia se podria dividir en 2 etapas, en la primera realizamos las rutas mas duras fisicamente hablando, con largas caminatas por hielo, fango, rocas y musgo, mientras que en la segunda, ya junto al grupo 2, realizamos trayectos mas llevaderos y con mas contenido cultural, como visitas a parques naturales y zonas habitadas.

Yo solo os voy a hablar de la primera etapa.

Comenzaré hablando de los protagonistas de esta aventura:

Javi "Gatchan": Estuvo malo los primeros dias de la ruta pero no quiso perdersela, realizo algunas de la mejores fotos que podeis ver aqui. Contaba chistes malos y utilizaba su privilegiada mente para gastar bromas a los demas, su ingles nos saco de mas de un apuro.

Dario "Utopia": Llego a Islandia con muchas ganas de comerse la isla, y vaya si se la comio, tanto que le dio un arrechucho de la muerte y poco mas y es baja. Logro reacerse y pudo hacer muchas vueltas mas. Maestro en recocimiento y temperaturas extremas. Tenia el abrigo mas calentito.

Abel "Ragnarok": Dudaba con el viaje pero nada mas tomar el avion ya estaba el primero. Llevaba un gorrito que le daba un toque de snowboard. Se integro muy bien gracias a su larga cabellera. Era un experto en grabar con el movil.

J. Lucia "Mama/Tia": Se cambio al grupo 1 en el ultimo momento y vino sin hacer las pruebas fisicas, pero demostro su nivel al terminar todas las etapas. Muy habil en el uso del baston.

Saul "xxl": Ese soy yo, jejejeje. Tenia ganas desde pequeño de ser explorador artico y ahora gracias a esta oportunidad por fin podia hacer mi sueño realidad.

y Alberto "Icelander": Un autentico vikingo domador de caballos, nuestro mejor guia, se curro todas las rutas, la planificacion, el alquiler de los equipos, etc, etc. Sin el nada de esto hubiera sido posible. Sentia un gran debilidad por los saltos de agua.

...

Tras bajar del avion empezamos a notar el cambio en el clima, mucho mas fresquito, sobre todo cuando hacia viento. Alberto nos estaba esperando para recogernos, asi que llegamos a su residencia y dormimos. A la mañana sigiente ya estabamos comprando las provisiones para los dias de ruta y pronto salimos hacia nuestro objetivo, la peninsula de Snaefellsnes.

La primera parada fue en unos saltos de agua en el desvio de la bahia, y ahi por nos dimos cuenta la peculiaridad del suelo islandes, que nunca es tan duro como parece ser. Poco mas adelante encontramos una iglesia tipica islandesa. Estas iglesias estan siempre abiertas asi que pasamos a echar un vistazo. Al lado de la iglesia habia un cementerio y me acerque a ver, las tumbas eran bastante humildes y habia dos pequeños arboles que nacian de dos de las tumbas. Era la primera vez que veia algo asi, pero me gustó la idea, era algo asi como David el gnomo, que se convertia en arbol cuando su vida llego a su fin.

Tras esta parada visitamos las ruinas de un poblado vikingo, bordeamos las montañas y pasamos por Borgarnes, rumbo a Elbor, un viejo volcan en medio de un campo de lava que lleva hasta el mar. En las cercanias del volcan, Alberto conocia la existencia de unas cabañas muy cucas, con su jacuzzi y todo, y tras regatear nos las dejaron a un precio buenisimo.

La ruta hasta el volcan fue bastante ardua, los escasos 3 km que separaban las cabañas del volcan se convitieron en mas de 8 km debido a las vueltas y reveltas que debimos tomar para llegar. Habia tres posibles caminos, uno por el que entrabas en un bosque de arbustos y rocas volcanicas que hacian casi imposible el avance; otro por el que bordeabas el bosque pero te adentrabas en terreno pantano en el que se te hundian las botas hasta el tobillo en fango; y un tercero mezcla de los dos anteriores pero por el que ibas ademas por rocas que se hundian en el suelo al mas puro estilo humor amarillo. Dario y Abel optaron por el primero y los demás tiramos por el tercero.


Al llegar a lo alto del volcan el viento soplaba muy fuerte, era dificil incluso mantenerse de pie. Alberto se fue a dar una vuelta por el borde, saltando y trepando como si llevara toda la vida en Islandia y yo decidí seguirle junto con Abel y Dario, pero pronto cambiamos de idea pues realmente todavia no comprendo como logro dar la vuelta al volcan. El terreno era abrupto, se caia a cachos y encima el viento te tiraba si te descuidabas. Dario y Abel decidieron volverse y yo segui un poco más pero los riesgos eran demasido altos, asi que opte por bajar al interior del crater.
El descenso fue facil, ya que habia un turruntero de rocas volcánicas y lo bajé en modo avalancha. Al llegar al centro del volcan cambió el paisaje y el viento dejo de soplar, una caverna llena de nieve y un hito de piedras presidian este sobrecogedor escenario, me quite los guantes y coloque una piedra más en lo alto del hito, depues deje mi sello personal. Antes de irme, vi algo blanco en el suelo, aparte la nieve y el musgo que habia encima y encontre un hueso. No sabia de quien o de que era, pero lo guarde y subi trepando hasta la cima del volcan donde Dario, Alberto y Abel me esperanban.

A la vuelta del Elbor nos perdimos en el bosque de arbustos ya que ya no disponiamos de la referencia del volcan para guiarnos, el sol se habia puesto y comenzaba a anochecer. Javi y Lucia llegaron a la cabaña sin problemas pero nosotros mientras intentabamos encontrar el camino en un bosque de arbustos, piedras, fango y musgo. Alberto se separo y desaparecio, Dario Abel y yo segimos hasta el rio y al final llegamos a la cabaña, Alberto, que ya habia llegado, dijo que nos perdio entre los arbustos y decidio seguir adelante el solo.
Ya en lugar seguro, nos quitamos la ropa y nos metimos en el jacuzzi a beber unas "Polar Bear", y cuando empezabamos a arrugarnos como pasas comenzó a nevar. Se nota que en Islandia el agua caliente es gratis. Despues del baño cenamos, y por fin pudimos descansar.


(continuara...)

El viaje a "Iceland", el pais de los helados

Hace mucho tiempo, cuando era solo un crio, tenia un libro llamado viaje al pais de los helados o algo asi (tengo que buscarlo) y despertó en mi un espiritu de averturero artico.

Soñaba con ir al polo y ver las maravillas que se escondian tras las montañas de hielo y los glaciares.

Ahora, gracias a Alberto, hemos podido cumplir ese sueño.

Este blog lo creo con la intencion de que cada miembro de la familia pueda poner su granito de arena para contar la historia de la familia Santos en el pais de los helados o donde quiera que nos lleve el destino.

Tio javi, Talia, Maribea, Abel, Chani, Dario,
Javierin, Saul y Padilla; Fto: Javier gomez